¿Eres de las que se hace esta pregunta cada vez que tiene que salir de casa? Pues para que lo sepas, no hace falta tener un vestuario inmenso para poder combinar con cierto estilo y elegancia, sino un poco de sentido común y aceptar que hay un tipo de prendas y de colores que nos quedan mejor que otros.
Pero por si esta opción se escapa de tus posibilidades, te proponemos unos consejos a tomar en cuenta si quieres ir estupenda en toda ocasión.
- Si están invitadas a un evento de día, se debe evitar el negro. Esta temporada los colores pasteles ofrecen infinidad de tonalidades para elegir.
- Para ir a trabajar, nada de ajustados o transparencias. Se debe privilegiar la comodidad con camisas y pantalones con zapatos de tacón intermedio. Maquillaje suave y peinado tranquilo.
- Las que tienen mucho busto, en principio, deben elegir un buen corpiño y camisas escote en V para despejar el cuello.
- Una invitación a un cóctel obliga a vestirnos de corto y a usar tacones altos.
- En el caso de no poder adquirir ropa nueva para un evento, la mejor solución para estar a la moda es ponerse el traje de siempre combinado con zapatos y cartera de la última temporada.
- En un armario que se precie deben haber básicamente dos trajes sastre pantalón o falda, un par de jerséis combinables con los trajes, dos blusas, tres o cuatro pantalones de diferentes estilos y otras tantas faldas.
- Para disimular la barriga habrá que evitar el uso de géneros elásticos.
- Las de cintura ancha deben elegir prendas sueltas que se despeguen del cuerpo. La clave es resaltar las caderas con faldas, cinturones y pantalones que descansen sobre ese sector.
- Si te gustan las blusas o los jerseys con motivos floreados o llamativos, debes combinarlos con pantalones o faldas lisos, de colores que jueguen con alguno de los que tenga el jersey.
- Los tobillos gruesos no admiten sandalias con pulsera.
- No es necesario que nos adornemos en exceso con joyas o bisutería. Si salimos de noche será suficiente un pequeño collar haciendo juego con una pulsera o el clásico collar de perlas. Si decidimos colocarnos anillos, uno es suficiente. Los pendientes irán a juego con el collar o gargantilla y si son largos, mejor que el adorno del cuello no sea ostentoso.
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